
Los primeros días de una madre primeriza pueden ser realmente aterradores.
La multitud de familiares y amigos ansiosos por conocer al recién llegado, brindar consejo y prestar su ayuda, sumado a todas esas nuevas sensaciones que la nueva mamá está experimentando pueden ser abrumadoras.
A muchas parejas recién estrenadas como padres les cuesta trabajo poner límites a la hora de las visitas, y eso hay que entenderlo. Como «visitantes» es importante tener en cuenta y respetar los deseos de los padres.
Debes entender que están cansados y desorientados y que, en casos, en nuestro afán de brindarles un buen consejo terminamos confundiéndolos terriblemente.
Así que si de verdad quieres ayudar a esa mamá primeriza en tu entorno presta atención a los siguientes tips:
Esperamos que estos consejos te ayuden a canalizar tus buenas intenciones en algo productivo en un momento tan precioso e íntimo, como lo son esos días como madre primeriza.