El actor lidia con los malos comentarios sobre su vida privada, al mismo tiempo que se recupera de la separación de Irina Baeva.
La vida del artista no es color rosa como muchos piensan. En el caso de Gabriel Soto, ha tenido que lidiar con los señalamientos sobre sus relaciones, y aunque intenta disfrazar sus sentimientos frente a las cámaras, confesó que sí se ve afectado en algunas oportunidades.
En una reciente entrevista para el programa Venga la Alegría, el galán de exitosas telenovelas como Mi Camino es Amarte admitió que desde la separación de Geraldine Bazán su vida no ha sido fácil.
“Los comentarios que a veces la gente hace en redes sociales, que eso es un riesgo, el tema de las redes sociales es un arma de doble filo, únicamente los involucrados saben realmente qué es lo que pasó, y entonces la gente emite juicios y la gente emite comentarios, la gente especula sin saber y eso es muy delicado”, expresó.
Luego reconoció que las críticas sin soporte han afectado su vida y a pesar de estar acompañado de tanta gente, se ha sentido solo.
“Finalmente, a veces nos sentimos solos, a veces lloramos, a veces no es fácil llevar la carrera pública en ese sentido, porque muchas veces se enfocan demasiado en tu vida personal y no en tu vida laboral, y eso te llega y te afecta”, añadió.
En entrevistas pasadas, Gabriel Soto también reveló, que se apoya en sus hijas Miranda y Elisa Marie, para sobrellevar la separación de Irina Baeva y los malos comentarios de la prensa.
“He aprovechado para estar con mis hijas, para recuperarme. Estoy pasando un duelo muy complicado”, apuntó en el programa Hoy el pasado 5 de septiembre.