Sabine Moussier revela cómo enfrentó los diversos episodios que pusieron en riesgo su salud.
En los últimos años, la actriz ha enfrentado diferentes enfermedades que han puesto en peligro su integridad.
En 2010, la artista fue diagnosticada con el síndrome de Guillain-Barré, un trastorno poco común que hace que el sistema inmunitario ataque al sistema nervioso periférico.
“No podía ni recargar una rodilla sobre la otra, lloraba y me dolían las lágrimas, no me podía mover. Me dolía todo, el aire, pero era la piel, era la ropa, me lastimaba. No podía caminar bien, no sentía fuerza. Sentía agujas en las plantas de los pies, no las podía doblar, se me empezaban a poner rojas”, declaró en su momento.
Moussier también luchó contra el síndrome de fatiga crónica y varios virus en la médula espinal, el riñón y en el puente del cerebro.
Ahora, la artista contó cómo se encuentra actualmente y cuáles fueron los tratamientos que cumplió.
En un breve encuentro con la prensa, Sabine detalló que el próximo octubre cumple un año de estar libre de dolor.
“En octubre, más o menos, cumplo un año de estar libre de dolor. Ahora sí estoy viviendo. Retomando la vida. Retomar, estar tranquila, en paz y pudiendo respirar sin dolor, sin medicamentos, sin nada. Ya nada. Es increíble, pero lo que necesitaba era descansar para que mi cuerpo se recuperara y pudiera estar al cien”, indicó.
En otro orden de ideas, Moussier también informó que la relación con el padre de sus hijos ha mejorado.
“Muy contentos todos. Todo está trabajado y todo está en paz”, dijo al ser consultada sobre Jorge Peralta.
Recordemos que su más reciente trabajo en televisión es la telenovela La mexicana y el güero, donde interpretó a Olinka Cohen.