Siempre se deben dejar dos o tres horas de diferencia entre el momento de cenar y la hora de irse a dormir para evitar el insomnio y la indigestión.
La mayoría de los estudios realizados por distintas universidades han demostrado que el cenar muy tarde trae como consecuencia el poco descanso nocturno y el aumento de peso, por lo que se recomienda no irse a dormir sino dos o tres horas después de haber realizado la última comida del día.
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El desayuno debería ser una comida que aporte la energía que se necesita para el resto del día. Por su parte, el almuerzo tendría que ser la más importante e incluir en el plato un poco de fibras, proteínas, carbohidratos, algunas personas añaden algo de grasas. Por último, está la cena que puede ser fácil de preparar si se cocina algo sencillo pero nutritivo y con alimentos ligeros (con poca grasa) para lograr dormir correctamente y evitar las indigestiones en las noches.
Debemos olvidarnos de dulces y grasas pesadas al momento de cenar, cambiar todo eso por ensaladas, proteínas, vegetales cocidos, ya que en la noche es cuando menos calorías necesita nuestro cuerpo.
La mejor hora para comer
Las comidas diarias deberían realizarse de la siguiente manera: el desayuno entre las 7:00am y las 7:30am, el almuerzo preferiblemente hacerse entre las 12:00pm y las 12:30om y el momento de cenar es entre las 6:30pm y las 7:00pm.
Otra de las recomendaciones que ofrecen los nutricionistas es que las comidas no deben saltarse, porque al hacerlo lo que se generará en el organismo es más hambre para el siguiente plato. Recordemos que en cualquier hora del día que ingieras alimentos puedes deshacerte de las calorías con las labores cotidianas, pero si cenas tarde probablemente no consigas quemarlas por lo que el cuerpo lo guardará en forma de grasa.
Es difícil, pero seguir un régimen de horario para comer podría ayudarnos a perder peso de una manera fácil.