
El protagonista de La mexicana y el güero admitió que la distancia por trabajo marcó un antes y después en su matrimonio.
De acuerdo a lo expuesto, los conflictos comenzaron cuando les tocó abandonar México e irse a Miami por asuntos de trabajo.
“Fue una gran relación, nos la pasamos muy bien, vivimos aquí en México muchos años, luego salió un contrato en Miami, nos fuimos a Miami, ahí fue el punto de quiebre, nos desencontramos, ella empezó a ver cosas que quería cambiar y eso afectó a la pareja, vino la separación”, detalló en el programa Hoy.
“Yo me vine a vivir a México cuando se terminó el contrato. En 2016, las cosas ya estaban completamente rotas”, agregó.
El actor también recordó que cuando conoció a Maky a mediados de 1997 no fue de su agrado, pero años después todo cambió.
“En el año 2002 conocí a una Maky diferente. Acababa de tronar con su novio, estaba muy frágil. Me enamoré mucho de ella, me casé en 2003. Tuvimos dos hijas”, indicó.
En el citado espacio, Juan Soler también precisó que actualmente está enamorado, feliz y pleno con su nuevo romance.
“Tengo una muy linda relación con una persona que no tiene nada que ver con el medio, entonces no le gusta mucho la exposición”, sentenció.