viernes, marzo 29, 2024

Julio César Chávez se lava las manos ante la supuesta recaída de Rafael Amaya

Julio César Chávez hizo mención sobre los últimos escándalos que han salpicado a Rafael Amaya. 

El exboxeador, quien es dueño del centro de rehabilitación donde estuvo internado el actor, dejó claro que su posible recaída no es su culpa. 

En un breve encuentro con la prensa, el mexicano destacó que para tener una rehabilitación exitosa debe existir el compromiso de la persona involucrada. 

“La mayoría se salva, pero a mi no me consta que haya recaído la persona que ustedes mencionaron, porque yo no lo he visto. Yo quiero mucho a Rafael, somos muy buenos amigos y a mí no me consta que haya recaído, pero si hay unos videos ahí, eso ya no es mi culpa. Sigo ayudando a mucha gente y voy a seguir ayudando”, declaró. 

Del mismo modo, destacó que aquella persona que sale de una clínica y recae es porque no vuelve a sus juntas. 

Chávez también precisó que la finalidad de sus centros de rehabilitación es ayudar a los adictos a retomar sus vidas por medio de compartir sus experiencias. 

Asimismo, dejó por sentado que no necesita publicidad de nadie para dar a conocer la labor que realiza.

“Yo no necesito publicidad de nadie. Afortunadamente, gracias a Dios, mi lugar yo ya me lo gané. Lo más importante es ayudar a la gente que quiere recuperarse de cualquier adicción. Por eso puse las clínicas para comprometerme conmigo mismo y comprometerme con la sociedad”, indicó. 

Julio César Chávez se lava las manos ante la supuesta recaída de Rafael Amaya
Julio César Chávez se lava las manos ante la supuesta recaída de Rafael Amaya 2

Caso Rafael Amaya

Días previos la revista TVNotas publicó un video del protagonista de El señor de los cielos bajo presunto delirio de persecución. 

“Por fortuna no había tanto tránsito y corrió con suerte de no ser atropellado y en una de esas perder la vida. Por gracia divina, un conductor, sin saber de quién se trataba, se detuvo y lo metió en su coche para evitar que lo fueran a atropellar y se lo llevó a una gasolinera para que se tranquilizara”, contó un informante.

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