La bellísima actriz informó que decidió retirar sus prótesis mamarias.
En su cuenta de Instagram, la intérprete de Acorralada manifestó que fue una decisión difícil, pero está convencida que su calidad de vida mejorará.
Aunque desde muy niña siempre deseó tener los senos grandes, con el paso del tiempo entendió que este tipo de cirugías pueden ser contraproducentes.
“Quiero creer y tener fe de que esta operación es la luz, el camino que me está indicando Dios para salir de esto que he venido viviendo durante estos tres años. Creo que voy a poder ser testimonio de esperanza y fe para cada una de las mujeres que me escriben adoloridas y con tantos síntomas”, expresó.
“Fui una niña consciente de que no me crecían los senos y yo quería senos. Hoy entiendo lo que le hacemos a nuestro cuerpo al meterle este par de cuerpos extraños”, agregó.
Pese a que no mencionó mayores detalles de esta intervención quirúrgica, la venezolana se mostró emocionada y positiva.
Fue diagnosticada con un trastorno difícil de lidiar
Hace tres años, Maritza confesó que padece de fibromialgia- enfermedad reumática crónica caracterizada por dolor y sensibilidad muscular.
En aquel entonces, contó que sus dolencias llegaron desde el nacimiento de su primer hijo, pero ella pensó que era normal.
“Yo ya traía una lesión por el baile, por eso pensé que era normal, pero empezó a empeorar. Se empezaron a disparar las emociones como la frustración, la impotencia, la tristeza y me ha llevado 1 año y 8 meses hasta que tres médicos coincidieron con un mismo diagnóstico: fibromialgia”, detalló.