La reconocida animadora y actriz venezolana confesó cómo llegó la actuación a su vida
“Yo chiquita no quería ser actriz”. Gaby Espino, conocida por participar en telenovelas como Guerra de Mujeres y Santa Diabla, confesó que su mayor sueño no era actuar.
A Todo Corazón marcó el inicio de una carrera, que sin saberlo, la llevaría a lo más alto de la cima.
La serie juvenil fue transmitida en 1997 por Venevisión y contó con grandes actores como Adrián Delgado, Lourdes Martínez, Amílcar Rivero, Esperanza Magaz, Daniela Alvarado y Fernando Flores.
“En esta serie que se llamó A Todo Corazón yo tenía un novio que le dicen El Gato: Juan Alfonso Baptista, que es un actor súper conocido y él había quedado en esta serie. Yo era conductora de un programa infantil, pero él me presentó a los productores de la serie una noche patinando en Venezuela y estos productores al día siguiente lo llaman y le dicen: “Mira queremos saber si tu novia quiere hacer un casting” y yo cero, yo no era actriz, yo no quería ser actriz, ni estudiaba actuación, nada”, reveló Espino en el Podcast de Alejandro Chaban.
La famosa y querida venezolana agregó: “Yo estaba estudiando Comunicación Social. Estudiaba y trabajaba todos los días, pero nunca me llamó la atención. Yo no era una niñita que quería ser actriz. Yo chiquita no quería ser actriz, ni ir al Miss Venezuela”.
Pero… ¿Qué motivó a Gaby Espino incursionar en la actuación?
Espino reveló que la motivó las ganas de vigilar a su novio Juan Alfonso Baptista alias “El Gato”, quien había sido elegido para la serie mucho tiempo antes.
“Yo voy y pensaba que tenía que quedar en esa serie para ver al novio. Yo tenía 17 años, fui a hacer el casting y me dicen: ‘¿Quieres ser la protagonista?’ y yo solo había ido a hacer el casting de cuaima para ver al novio y quedé como protagonista de esa serie y de ahí comenzó todo”, admitió.
Gaby Espino manifestó que después de participar en la serie juvenil venezolana, se enamoró de la actuación y más nunca pudo salir, hasta ahora que se dedica a ser empresaria y animadora de eventos especiales en la televisión estadounidense.
“Luego de protagonizar A Puro Corazón comencé a prepararme y ahí me picó el gusanito de la actuación, fue una cosa que se fue dando y me fui enamorando de la profesión”, concluyó.