Lucía ha tenido que enfrentar duros momentos y su sufrimiento despertará el espíritu protector de Fernando.
Si el primer capítulo de Mujer de Nadie fue emocionante, el segundo no se quedó atrás pues Fernando sentirá la necesidad de proteger a Lucía de todos los que la quieren atacar.
Y es que ella tomará la decisión de denunciar a Heriberto por lo que le hizo y su príncipe encantado la acompañará sin pedir nada a cambio, él apareció en su camino para cuidarla.
Pero nadie le cree ya que creen que ella provocó la situación cubriendo así el delito de Heriberto, además de no tener “pruebas” del delito.
Lo peor es que se llevarán detenida a la pobre Lucía acusándola de supuesta invasión a la propiedad privada y “causarle heridas” a Heriberto Valdepeña, quien ahora es visto como la víctima.
Y si creían que ya era suficiente maldad, se quedaron sin palabras cuando Isaura tomó las escrituras de la casa de Don Jacobo y se las entregó al malvado Heriberto quien a cambio le dio línea de crédito abierta para que juegue como quiera.
Allí es donde comenzará la verdadera historia de traición y odio, pues Don Jacobo buscará la manera de borrar las fotos sensuales que Alfredo vendió, recuperar también sus escrituras y por supuesto, que dejen libre a su amada hija.
A cambio, firmará un supuesto contrato de compra-venta de la casa al malvado lobo para que cumpla, sin saber que estará dando carta blanca a quien menos debería.
Pero el príncipe valiente reaparecerá, rodeando con sus hermosos brazos a nuestra protagonista asegurando que los buenos si están presentes ¿será que logrará sacarla de la cárcel? tendremos que esperar al próximo capítulo de Mujer de Nadie.