La ganadora del Oscar reveló que pasó unas siete semanas aislada en una habitación de su casa en Reino Unido.
La pandemia del covid-19 supuso todo un reto para el mundo, ya que tras la aparición de los primeros casos en China a finales de 2019, muchos han sido los afectados, entre ellos la reconocida actriz, Salma Hayek.
“Mi médico me rogó que fuera al hospital porque estaba muy mal”, confesó Hayek a Variety, a la vez que añadió que pasó unas siete semanas aislada en una habitación de su casa en Reino Unido.
En este sentido, reveló que cuando el doctor le pidió que asistiera a un centro médico, ella se negó rotundamente y prefirió quedarse en casa con su esposo, el director ejecutivo de Kering, François-Henri Pinault. 58, y su hija de 13 años, Valentina.
“Dije no gracias. Prefiero morir en casa”, contó.
Hayek, que estuvo con oxígeno durante un período durante su enfermedad, aún no ha recuperado por completo la energía que alguna vez tuvo.