La estrella mediática se culpa a sí misma del millonario robo que sufrió en la visita a Francia por la semana de la moda en París, último evento de la moda del calendario ‘fashion’.
Después de las sospechas que circulaban sobre el mayordomo del hotel en donde fue victima la esposa de Kanye West y los rumores sobre una supuesta complicidad del guardaespalda en el robo, Kim Kardashian ha manifestado que la única persona culpable por el lamentable hecho es ella misma.
Kardashian se culpa a sí misma por la perdida de más de 11 millones de dólares en joyas al confesar que abusó de la exposición de sus pertenencias en las redes sociales.
“Kim está en shock. Este incidente la hizo replantearse toda su vida”, reveló un fuente cercana de la familia a la revista People.
Entre las pérdidas se encuentra un anillo de 15 kilates que le regaló hace un mes su marido, valorado en 4.5 millones de dólares.
Por su parte, el rapero quiere volver a comprarle otro lujoso anillo pero la estrella del clan Kardashian se ha negado rotundamente: “Kanye quiere comprarle el anillo de nuevo, pero ella sólo dice que no quiere pensar en ello. Sólo quiere que todo vuelva a la normalidad”, añadió el informante.
Además, Kim ha pedido reforzar la seguridad de su familia, especialmente la de sus hijos: “Anteriormente no quería pagar por seguridad armada, pero ahora se da cuenta de que la familia necesita protección de 24 horas”, agregó otra fuente.
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