El caso entre el buró federal y la compañía tecnológica parece haber tenido un final inesperado tras las declaraciones del FBI.
Uno de los litigios más polémicos de los últimos años ha tenido lugar en Estados Unidos tras una petición legal en donde los federales solicitaban acceso a un iPhone involucrado en los hechos delictivos de San Bernardino.
Muchos, desde empresas de tecnología hasta figuras públicas tomaron posición tras conocer de qué se trataba la demanda impuesta por el cuerpo de seguridad y de ahí en adelante todo es historia. Apple se rehusó a cooperar con argumentos bastante lógicos (y también comerciales) y para el 21 de marzo, el Federal Bureau Of Investigation pedía a la corte suspender la audiencia alegando que habían encontrado un método alternativo para acceder al dispositivo.
En su momento, Craig Federighi de Apple explicaba que “Para saltar las barreras de protección de Apple, el FBI nos pide que creemos una puerta trasera con un software que invalide las protecciones de códigos, creando de manera intencional una vulnerabilidad que permitiría a la fuerza gubernamental entrar al iPhone. Una vez que se cree este software, que el gobierno pretende utilizar en varios iPhone, se convertirá en una debilidad que los criminales y los hackers pueden utilizar para causar estragos en la seguridad y privacidad de todos”.
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Y con el paso de los días todo terminó, de acuerdo a lo declarado por la fiscal Eileen Decker, quien aseguró que han decidido concluir el conflicto legal debido al argumentado del Buró.
«Nuestra decisión de concluir con las acciones legales está únicamente sujeta al hecho de que, con la reciente ayuda de un tercero, somos capaces de desbloquear el iPhone sin comprometer la información almacenada en el teléfono,» dijo Eileen Decker.
En dicho comunicado, el funcionario aseguró que con el método utilizado el organismo de investigación puede saltarse las barreras de seguridad sin comprometer el contenido, con lo que Apple queda en una posición bastante comprometedora al no poder (aparentemente) garantizar a sus usuarios un nivel absoluto o bastante elevado de seguridad.
Pero por otra parte, la empresa también demostró hasta último momento defender la privacidad que sus equipos proporcionan a sus consumidores, lo cual resulta un poco beneficioso dentro de todo lo sucedido.
Lo cierto es que el caso ya es un precedente en materia de seguridad y, aunque no se materializara un juicio, muchas empresas relacionadas a la tecnología empiezan a tomar medidas para hacer más seguros sus sistemas.